Oposiciones de Maestros de Audición y Lenguaje: Recomendaciones para elaborar la Programación Didáctica.

Oposiciones de Maestros de Audición y Lenguaje: Recomendaciones para elaborar la Programación Didáctica / Plan de apoyo.

Nuestra profesora de preparación de opositores de Audición y Lenguaje, Inés Alarcón, maestra funcionaria de carrera de la especialidad y experta en Lingüística,ha elaborado esta entrada. Se lo agradecemos y la compartimos con vosotros.

Tradicionalmente los opositores de educación centran sus esfuerzos de estudio y preparación durante el curso escolar en el que se convocan las oposiciones. Esto hace que, a menudo, la cantidad de trabajo les desborde y que la programación se vea apartada del plan de estudio.

Muchos opositores creen que después de realizar la primera prueba, si se dedican a tiempo completo serán capaces de sacarla adelante. Desde nuestra experiencia sabemos que la plaza, tanto en Maestros como en Secundaria, recae sobre la defensa de la programación. Así que os animamos desde aquí a empezar con ella.

En este post os vamos a hablar de las programaciones o planes de apoyo de Audición y Lenguaje, pero muchas de las cosas que contaremos seguro que también son de interés desde otras especialidades.

Lo primero que debemos hacer es ir a la convocatoria anterior y leerla detenidamente. Ahí se encuentran las palabras clave que deberemos tener en cuenta para salir exitosos de esta prueba. Cada comunidad tiene autonomía a la hora de plantear cómo quiere el plan de apoyo y observamos diferencias importantes entre ellas.

Las hay que dan un auténtico guión cerrado con todos sus puntos como en Cantabria, que, por cierto, ha decidido hacer la segunda prueba en el mes de septiembre.

Otras comunidades autónomas tienen un enfoque más próximo a la logopedia tradicional, poniendo todo el énfasis en la intervención directa con el alumno como en Madrid, por ejemplo.

Comunidades autónomas como Aragón, en el Plan de Apoyo, piden, además de la intervención individualizada, actuaciones con un claro enfoque inclusivo, esperando de nosotros que nos manejemos hábilmente sobre cómo satisfacer las necesidades educativas de los alumnos a nivel de centro y aula.

En el caso de la última convocatoria de Islas Baleares este propósito hace que en lugar de hablar de “unidades didácticas” hablemos de “actuaciones” y que en la segunda parte de la defensa del plan de apoyo podamos conseguir la plaza exponiendo una unidad didáctica al uso o una campaña de sensibilización, por ejemplo.

Otra de las diferencias notables las encontramos en el modo en que ajustan los requisitos generales de toda programación a nuestra especialidad.

Tenemos convocatorias de oposiciones en las que la especialidad de Audición y Lenguaje apenas se diferencia del resto de especialidades y de su lectura se desprende que nuestro trabajo se enmarca solo desde el currículo prescriptivo.

En otras, parten del currículo y las áreas instrumentales para luego pedir que atendamos las necesidades comunicativo/lingüísticas propias del alumno.

Algunas convocatorias se centran en las necesidades comunicativo/lingüísticas. Este es el motivo por el que la programación pasa a llamarse plan de apoyo o plan de trabajo.

Si en vuestra convocatoria se os pide que nuestra intervención quede enmarcada dentro del currículo podemos conseguirlo con un buen conocimiento del currículo de del área de Comunicación y representación o de Lengua castellana y literatura. A partir de ahí, habrá que seleccionar los bloques de contenido con los que podamos alcanzar los objetivos propuestos, anclando de este modo nuestra intervención al currículo.

En laclaseencasa preparamos a alumnos de todas las CCAA y esto nos permite tener una visión privilegiada sobre las tendencias pedagógicas en las oposiciones de Maestros de Audición y Lenguaje.

Observamos una tendencia cada vez más inclusiva en las convocatorias. A los maestros especialistas en Audición y Lenguaje se nos pide dominar herramientas y competencias para implementar la inclusión educativa.

En aquellas comunidades cuyas convocatorias ya han iniciado este camino os aconsejamos que profundicéis en ellas en base a la normativa y a metodologías basadas en el Diseño Universal de Aprendizaje (DUA).

En aquellas que siguen un guión más clásico, incorporad al hablar del centro y sus documentos cómo atender a los ACNEAE desde este paradigma. También os aconsejamos que vayáis recopilando todo el material que sobre esto podáis encontrar. No sabemos si, en la próxima convocatoria, vuestra comunidad autónoma dé un giro en esta dirección y debáis profundizar aún más en ello.

El hecho de que los criterios marcados en las distintas convocatorias sean distintos y que puedan cambiar cada año, unido a los previsibles cambios legislativos que puede haber en materia de Educación no debe hacer que pospongáis este propósito.

En laclaseencasa sabemos que, a pesar de las diferencias, existen puntos que siempre hay que desarrollar. Si estos puntos han sido estables a lo largo de los años y en toda nuestra geografía es porque son el núcleo duro del Plan de Apoyo y  estables ante los vaivenes legislativos. Nos referimos a la descripción del contexto del centro, la descripción del alumno o alumnos y la intervención logopédica para ellos.

Para abordar el contexto os aconsejamos empezar por la normativa estatal para luego pasar a la autonómica.

Podemos además ordenarla por categorías (normativa general, específica de primaria, específica de atención a la diversidad…). Es importante que la normativa, además de vigente, tenga alguna relación con el Plan de Apoyo que vamos a desarrollar. Sabemos que se valorará nuestra capacidad de seleccionar la normativa más relevante. Por eso, se valorará también que en el desarrollo de la programación hagamos referencia a ella, explicando cómo la implementamos.

Con la normativa ya expuesta podemos seguir nuestra descripción del contexto con la localidad. Se trata de hacer una breve descripción de su ubicación, población y servicios en los que se encuentra el centro educativo en el que desarrollamos nuestra labor.

Si vamos de lo general a lo particular, el siguiente punto a describir en la contexto es el Centro. En este caso, deberíamos responder a preguntas como: ¿Qué tipo de centro es?, ¿cuántos alumnos tiene? ¿Cómo está organizado físicamente?, ¿Dónde se ubica nuestra aula?, etc.

Descrito el centro físicamente queda describirlo en lo referente a los documentos. En ellos encontraremos la identidad de la comunidad educativa que allí trabaja, su filosofía pedagógica, sus principales líneas de actuación y también los programas concretos que para ese curso se propone el Claustro de Maestros.

Escribir sobre la contexto es relativamente sencillo y al lograrlo sentiremos que estamos avanzando en nuestra preparación.

El siguiente punto que abordar, sin temor a los cambios que puedan surgir en nuevas convocatorias es la descripción del alumno o de los alumnos.

De nuevo, debemos ir a la convocatoria para saber si la programación está dedicada a uno o varios alumnos. Sea como sea, debemos definir a los alumnos en base a la Evaluación Psicopedagógica que previamente ha realizado el departamento de Orientación y, sobre todo, en base a su competencia comunicativo/lingüística.

Si no tenemos experiencia podemos buscar en los manuales. En el DSM V, por ejemplo, tenemos las características prototípicas de patologías como la discapacidad intelectual o el Trastorno del Espectro Autista. Así, a partir de una fuente bibliográfica de confianza escogeremos primero una patología, y, dentro de esta patología, un grado de afectación.

Con esta descripción ya podemos hacer frente a la intervención logopédica. Debemos, además, proponer actuaciones inclusivas en sus entornos escolares o anclar la intervención que realicemos en el currículo prescriptivo. Sea como sea, debemos dar respuesta a las necesidades comunicativo/lingüísticas que de la descripción anterior se desprende.

De nuevo, si no tenemos mucha experiencia debemos echar mano de la bibliografía.

El libro editado por laclasseencasa Supuestos prácticos de Audición y Lenguaje puede ser un buen punto de partida, puesto que a partir de una descripción genérica (TEA grado 3, Discapacidad Intelectual moderada, discapacidad auditiva leve…) desglosa las necesidades, objetivos, contenidos, competencias, metodología, actividades, etc. que pudiera necesitar un sujeto con esa etiqueta diagnóstica.

Si tenemos experiencia, el trabajo se facilita y hacer la programación sobre un alumno con el que se ha trabajado es siempre una buena opción. Esto nos permitirá dar coherencia y cohesión y, sobre todo, será creíble.

Transmitir credibilidad es una de las cualidades imprescindibles en cualquier defensa del Plan de Apoyo ante un tribunal.

Terminamos esta entrada esperando que pronto iniciéis vuestra elaboración de la Programación Didáctica o el Plan de Apoyo y que éste os lleve a vuestra deseada plaza.

Mucha suerte a todos y todas!

Inés Alarcón.

Deja un comentario